viernes, 27 de diciembre de 2013

Cuidados de la piel, personales e imprescindibles

El cuidado de la piel está en manos de las cremas como las rejuvenecedoras, que tienen la función de disminuir la muerte celular de la piel y producir cambios en su textura, por lo que son esenciales para la aportación de antioxidantes protectores y efectos regeneradores. 
Algunas incluyen también protección del daño celular y control de la producción de melanina.

Las cremas anticelulitis poseen componentes que actúan en la epidermis y reducen paulatinamente la aparición de la antiestética piel de naranja, generalmente sin efectos secundarios. 
Por otro lado, las cremas corporales de hidratación intensa son eficaces para la hidratación corporal terapéutica de áreas propensas a la descamación o callosidades. Estas incorporan los mejores elementos hidratantes que impiden la cristalización de la urea, lo que evita la pérdida de agua a través de la piel.

Las cremas antiojeras tratan la zona ocular, que es muy delicada y necesita un producto especial que evite inflamaciones y ayude a su relajación. Algunas incluyen un componente reflectante que ayuda a disimularlas.

El tratamiento del cabello se lleva acabo a base de productos que hidratan las fibras capilares y estimulan los folículos pilosos, favoreciendo el crecimiento del cabello, hay lociones que tienen un efecto que enmascara la alopecia o la calvicie. Podemos tratar el volumen del cabello a base de un tratamiento de keratina, dotándolos de mayor riqueza y consistencia.

Las manos son la zona más expuesta a las agresiones exteriores, por lo que existen cremas hidratantes y con efectos que impiden la evaporación. Las cremas regeneradoras previenen el envejecimiento, aportan hidratación y elasticidad, además de estimular la regeneración de la piel. Otros productos de belleza como el protector solar son indispensables, así como las cremas reafirmantes para tener un cuidado óptimo de nuestra piel.

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